lunes, 3 de mayo de 2010

Lesiones (parte II)

Las lesiones de ballet se pueden originar por diferentes y múltiples factores que involucran la interacción biomecánica compensatoria en columna y extremidad inferior, así como los factores medioambientales y de calzado. Las partes corporales más vulnerables a lesionarse en la danza son el pie, la rodilla, la cadera y la columna lumbar. Muchos estudios han demostrado que por lo menos el 50 por ciento de las lesiones ocurren en pie y tobillo. Por otra parte, las fracturas por estrés o sobreúso son lesiones que con frecuencia son resultado de una técnica inadecuada y defectuosa que provoca modelos de movimiento mal adaptados. Estas lesiones requieren de la comprensión de la forma de arte y conocimiento de la anatomía porque en especial el “turnout” es el que con frecuencia contribuye a este tipo de lesiones.

CAUSAS AMBIENTALES
Estas causas son las que producen las lesiones conocidas como las relacionadas con la danza. Aunque en la mayoría de estas causas ambientales el personal de danza no tiene efecto sobre esto. Entre las causas ambientales se encuentran el poco acceso a recibir clases de entrenamiento diario indispensable para un trabajo profesional y de compañía.

a) Temperatura: La temperatura ambiental no puede caer debajo de 68-70°F. Se ha mencionado que las lesiones músculares ocurren frecuentemente en bailarines con inadecuado calentamiento. En temperaturas excesivas no se predispone directamente a sufrir una lesión pero la producción excesiva de sudor y la pérdida de agua y electrolitos tienen sus complicaciones propias. Sin un reemplazo adecuado, los músculos pueden sufrir calambres, espasmos o problemas médicos mayores si ocurren por un período largo.

b) Piso: Factor importante en las causas ambientales de lesión. El piso para un bailarín es fundamental. Existen teatros y salones de danza donde el piso (duela o linolium) está directamente colocado sobre el cemento, lo que no distribuye adecuadamente las fuerzas de impacto, en especial, al caer de un salto. Esto produce problemas importantes en pie, columna lumbar y huesos principalmente la tibia y los metatarsianos, sitios frecuentes de fracturas por estrés.

TIPOS DE LESIONES

Los tipos de lesiones se pueden considerar de acuerdo con las diferentes partes y estructuras corporales que afecten

Lesiones articulares: que no sólo incluyen la parte ósea de la articulación sino también las estructuras de la articulación misma (cápsula, ligamentos, sinovial, meniscos etc.)

Lesiones óseas:
  • Fracturas: las más frecuentes son las fracturas del 5to metatarsiano y se producen generalmente en un movimiento de inversión forzada.
  • Fracturas por estrés: comunes en los bailarines, son el resultado de un estrés local repetitivo, encontradas principalmente en el 2do metatarsiano y en la tibia. Si la presencia de la fractura por estrés es ignorada, puede progresar hasta la fractura total. Un dolor persistente durante la actividad en un área bien localizada sugiere una fractura de este tipo.
Lesiones tendinosas: tendinitis que van desde una irritación pura del tendón o bien una gran inflamación como resultado de un número importante de repeticiones de un movimiento específico.

Ruptura tendinosa parcial: Resulta de un desgarro de las fibras de un tendón mientras otras permanecen intactas y el reposo con alguna inmovilización es usualmente requerido para su tratamiento.

Ruptura tendinosa total: poco común en los bailarines. La más frecuente es la que se produce cuando el tendón extensor es tirado y arrancado de la falange distal del dedo, lo cual provoca que la falange se caiga bajo o hacia el dedo. Origina la entidad conocida como Dedo Mallet.

Ocasionalmente los bailarines sufren de rupturas tendinosas totales como la del tendón de Aquiles o el tendón rotuliano que ocurren ante una contracción violenta y repentina del músculo. Estas lesiones suelen ocurrir por un olvido del bailarín de la posición de su pie o bien cuando sufre de un resbalón de la pierna de apoyo. Comúnmente ocurre en bailarines mayores o maestros de danza que al demostrar o realizar un gran salto, desacostumbrados a la rutina, necesitan de una gran fuerza muscular explosiva para realizar el movimiento.

Tenosinovitos o peritendinitis: los tejidos cercanos al tendón pueden ser sitios de irritación e inflamación y si afecta la vaina tendinosa origina una tenosinovitis. Mientras que en tendones que no tienen vaina propia como el aquileo y el rotuliano, los tejidos blandos cercanos al tendón se inflaman y se produce una peritendinitis. Ambas pueden deberse a un sobreúso del tendón que generalmente se debe a una falla técnica y es sometido a un esfuerzo repetitivo durante un movimiento específico. Clínicamente se presenta dolor e inflamación a lo largo del tendón y su vaina, los movimientos son dolorosos y a su examen se puede percibir la crepitación durante el movimiento. El reposo produce un rápido alivio y en otros casos es necesario apelar a la crioterapia, U.S y fisioterapia en general. En raras ocasiones, el tratamiento es quirúrgico y se requiere de una descompresión de la vaina tendinosa cuando es muy crónico y falla el tratamiento conservador. En los bailarines algunas veces se presenta cerca de la inserción del tendón de Aquiles cuando se produce una presión en esa área por un inadecuado amarre de la zapatilla de ballet.

Lesiones musculares: Afortunadamente, las lesiones musculares serias no son frecuentes en bailarines y los tirones son poco frecuentes.

Desgarre muscular: Pueden ocurrir y frecuentemente se asocian a un inapropiado e incompleto calentamiento o bien si se trabaja en un ambiente extremadamente frío. El tratamiento inicial es el reposo para minimizar el sangrado y prevenir un desgarro muscular mayor. La crioterapia controla el sangrado y un vendaje compresivo también, elevar la extremidad disminuye la presión del área lesionada, la movilidad pasiva y activa se inicia inmediatamente después de que el sangrado ha cesado. Es esencial que el músculo retorne con el máximo de fuerza antes de bailar ya que esto permitiría su retorno al máximo y un retorno gradual de clase de ballet puede ser usado como parte de un programa de rehabilitación.

Extraido de Danza en Español-Salud

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